- Abandono progresivo de los combustibles fósiles.
- Incremento de la eficiencia energética (un 20% para 2030 y un 40% para 2050).
- Incremento de la generación eléctrica con energías renovables (que suponga un 35% en 2030 y el 100% en 2050).
- Reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero en un 40% para 2030 y en un 90% para 2050.
- Gestión inteligente de la demanda energética.
Impulso al coche eléctrico
Según lo establecido en el borrador de la Ley de Cambio Climático, el gobierno balear pretende obligar a las flotas de vehículos de alquiler a que vayan incorporando de manera progresiva el coche eléctrico. El objetivo: que para 2035 el 100% de la flota deberá ser eléctrica. Los coches de combustible fósil particular también tienen los días contados en las islas. No podrán entrar a la isla los coches de combustible diesel a partir de 2025 y, los de gasolina, a partir de 2030. Se pretende que en 2050 el parque móvil esté totalmente descarbonizado. Para facilitar el impulso del coche eléctrico, además de modificar la legislación actual, el gobierno balear destinará en los próximos años 30 millones de euros para ayudas para la instalación de 500 puntos de carga que alimenten tanto a coche eléctrico particular como de alquiler. Otras medidas incluidas en la ley La nueva Ley de Cambio Climático del Gobierno Balear tiene prevista su entrada en vigor el primer trimestre de 2019. En ella, además de lo anterior, se introducen las siguientes medidas:- Toda nueva ley o política pública deberá evaluar como contribuye en la emisiones de gases de efecto invernadero.
- El alumbrado público en 2025 deberá ser de máxima eficiencia, mediante la utilización de tecnología LED.
- Todos los aparcamientos, naves industriales y nuevas edificaciones de más de mil metros cuadrados deberán incorporar paneles de energía solar fotovoltaica.
- Los edificios en suelo rústico no destinados a usos agrarios tendrán que autoabastecerse con energías renovables. Se fomentará el autoconsumo compartido y el balance neto.
- Las centrales térmicas contaminantes que predominan actualmente en las islas deberán cerrarse o reconvertirse a producción de energía limpia (si finalmente el Gobierno General da la autorización).
- Las PYMES, en 2020, deberán calcular y registrar su huella de carbono y, a partir de 2025, tendrán que presentar planes de reducción con objetivos mínimos vinculantes.